A MI NIÑO

Que larga se hizo la espera
descontando día a día
el paso de lunas muertas.
Te acunaré con mimos,
te cantaré nanas nuevas
hasta que te hayas dormido.

No sé si eras guapo ó no,
¡a mí me lo parecías!
con aquellos rizos de oro
y tus ojillos de cielo...
era placer tan divino
poderte comer a besos...

Tengo fechas grabadas
cual fiestas en calendario,
como el día en que tú solo,
te lanzaste de aventuras,
investigando el pasillo
desde la sala a tu cuna.

Más tarde la guardería,
que bien poco te gustaba,
¡que mal trago cada día!
tú, llorando te quedabas
yo, llorando me venía

Aún guardo aquellos dibujos
que algunas veces hacías
y luego me regalabas,
¡que perfectos te salían!
para la edad que contabas

Han ido pasando años
desde Espinete y Popeye,
¡ya no precisas mi mano!,
pasó tu amor a los Héroes
y el de a Bosé ó Mecano.

Ahora me siento orgullosa
cuando tocas el violín...
¡que emoción tu melodía!
yo imagino que ese día
tocas sólo para mi.

¡Mas por favor!...
No me digas que estoy tonta,
si alguna vez no recuerdo
donde puse cualquier cosa,
cuántas veces ¿lo recuerdas?
rastreábamos buscando
famóbil, coche ó pelota.

Ni te enfades si te digo,
que comas ó abrígate,
¿que eres mayor?, ya lo sé,
no es controlarte, es... cariño
pues con 20 ó con 100 años,
tú... ¡siempre serás mi niño!
                                              marila